domingo, 23 de junio de 2013

MENSAJE 82



Querida:

¿Te enamoraste y no sabes por qué?. Dices que no lo sabes, pero que conmigo te sientes como volando por los aires.

Me alegro tanto de que conmigo sientas esa cosa tan maravillosa, que te sientas como volar de gozo. A mi me pasa precisamente lo mismo, que nunca me canso de sentir tu piel en contacto con a mía. No podría vivir sin sentir tus caricias, tus abrazos, tus besos, tus penetraciones, tus convulsiones, y derretirme con todo el gusto imaginable dentro de tu estado natural y salvaje.

Déjate llevar por ese sentimiento, déjate llevar por el placer,…., que a mi me gusta mucho, pero que mucho, mucho, mucho,…. y hasta me excita que tú también lo sientas por mí. Qué tontas esas pobres doncellas tan reprimidas, que se pasan la vida sin amor, sin placer,….algo muy triste, ¿no crees, cariño?, pero nosotros no vamos a ser así. Nosotros amamos la libertad, y lo que es más importante: nos amamos con toda pasión, porque sabemos ser buenos amantes.

Gocemos junto cuanto podamos, disfrutemos de nuestra felicidad particular, que no se termine nunca, que no haya cicatrices, y cuando terminemos exhaustos de toda esta tempestad de placer que nos concedemos mutuamente durante toda la tarde, nos quedemos los dos dulce y relajadamente dormidos, y soñando en futuras felicidades que compartiremos.


Te echo de menos, ansío poseerte ya, y te quiere mogollón tu amante, le Vizconde du Valmont

No hay comentarios:

Publicar un comentario