Querida:
A falta de tu amor, una profunda tristeza invade mi alma. Los días me amanecen fríos y grises, me siento como llorar y como si en mi corazón estuviera siempre lloviendo, y esa lluvia de lágrimas cayera sobre un infinito océano que nunca termina por llenarse.
Así es mi vida sin ti, triste, gris y aburrida, siempre esperando como un milagro inesperado a que tú como un sol que brilla, vuelva a dar la alegría y el calor que necesito.
Sin ti mi vida es una continuación de tristes nubarrones, de días húmedos por las lágrimas y los continuados llantos a montones que sufre mi corazón.
Me ha habituado a esa triste vida de tormentas, en la que poco sale el sol, y por las noches con mi penar, sólo siento que las estrellas de tu ausencia brillan mucho más.
Pero cuando lo veo todo negro, me obligo a recordar que una lluvia no es para siempre, y que tras ella, siempre a de volver a salir un nuevo sol para brillar. Pero me es difícil hacerlo llevadero sin ti. Sé que todo lo que necesito es amor, y por tanto te necesito a ti. Con la alegría de tu amor, ni mil monzones podrían contra mí.
Desde la memoria y el recuerdo de quién te amó con toda pasión, firmado……le vizconde du Valmont
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